La Federación Internacional de Pilotos de Líneas Aéreas (IFALPA), confirmó que ha activado el pedido de “Asistencia Mutua”, a solicitud de APLA.
Ahora bien, ¿de qué se trata? Nuestra Asociación no ha hecho más que pedir la entrada en vigencia de determinados protocolos contemplados en el “Manual Industrial” de IFALPA, al que todos las entidades socias de la federación global se encuentran vinculadas.
Lo que se ha pedido es:
– La prohibición de alquiler de aeronave con tripulación incluida (párrafo 2.5.1): las Asociaciones Miembro deben intentar persuadir a sus Compañías por cualquier medio apropiado y legal para que prohíban el arrendamiento de aviones con tripulación incluida.
– El congelamiento de número de asientos ofertados (párrafo 2.5.2.2): Cuando se lo soliciten, las Asociaciones Miembro deben alentar a sus Compañías a proporcionar mayor capacidad pero no a realizar vuelos en nombre o representación de la Compañía en huelga. Si se lo solicitan, las Asociaciones Miembro deben alentar a sus Compañías a congelar la capacidad, por cualquier medio apropiado y legal.
– La denegación de instalaciones de capacitación y entrenamiento (2.5.4): Las Asociaciones Miembro deben tomar cualquier medida razonablemente factible para disuadir a sus aerolíneas de brindar capacitación o instalaciones a otras aerolíneas, que pueden estar tratando de capacitar a los pilotos con fines rompe-huelgas.
– La asistencia a pilotos varados lejos de su base de origen (párrafo 2.5.5): Todas las asociaciones miembro deben, en la medida de lo posible, ayudar a los miembros de otras asociaciones varados lejos de su base de origen. La asociación miembro solicitante será responsable del reembolso de cualquier costo que surja de dicha asistencia.
– Y la solicitud de presentaciones y representaciones de la IFALPA (párrafo 2.5.7): Se puede solicitar a la Junta Ejecutiva que presente presentaciones y representaciones en nombre de una asociación miembro involucrada en una disputa industrial, a los medios de comunicación, la aerolínea, las autoridades de aviación y a niveles ministeriales, gubernamentales y políticos.
Más allá del profundo sentido solidario detrás de la aplicación de este protocolo, lo que se pretende es que gracias a la reacción de otros sindicatos nacionales de pilotos, se impida toda maniobra empresarial destinada a romper o minimizar los efectos de la huelga.