Esta semana Andes anunció la suspensión de sus operaciones tras más de diez años volando en el país. De este modo, mientras el Ministro Dietrich sigue sin dar respuestas, cientos de trabajadores (que no cobran salarios desde hace cinco meses) han quedado al borde de perder su fuente laboral.
Una y otra vez avisamos que la desregulación de la aviación argentina, la eliminación de la banda tarifaria (y su consecuente guerra de precios), el aumento de los costos dolarizados y la extranjerización de los vuelos terminarían así.
Soberbios, arrogantes, incapaces y con desprecio alarmante hacia el trabajo argentino, Dietrich y los funcionarios del área desoyeron sistemáticamente nuestras advertencias y dijeron que queríamos “politizar” el tema.
La “Revolución de los Aviones” ya se cargó a SOL, LASA y Avian, y ahora va por Andes. En el medio quedan los trabajadores y los sueños de cientos de familias.
Hoy los pilotos que pierden su fuente laboral parecen estar siendo condenados al destierro sin posibilidad de reinserción en el país. A esta historia ya la vivimos y sabemos que va a llevarnos años reconstruir el daño que están haciendo.
Por eso, tanto en Andes, en Avian, cómo en cada sector, los pilotos argentinos vamos a seguir defendiendo juntos las fuentes laborales con el esfuerzo, trabajo y dedicación que ha caracterizado siempre a este colectivo, adoptando todas las medidas que sean necesarias en nuestro plan de lucha.
